Los PSW apoyan a las personas en sus tareas diarias, como preparar la comida, comer, levantarse y trasladarse, bañarse, vestirse, cepillarse el cabello, cepillarse los dientes, hacer ejercicio diario y cuidar sus pies.
Los PSW también ayudan con los medicamentos o con los recordatorios para la toma de medicamentos, o ayudan a las personas a hacer ejercicios y rutinas diarios que les permiten recobrar su independencia.
Algunos PSW además realizan tareas domésticas, como lavar la ropa, limpiar, lavar los platos y, por lo general, ayudan a los clientes con las tareas domésticas que no pueden realizar por ellos mismos.
Pero lo más importante, es que los PSW brindan compañía.
A veces, el simple hecho de pasar tiempo con el cliente es todo lo que se necesita para alegrarle el día.